Arturo nació en un lugar de Cornualles llamado Tintagel.
El rey de Cornualles, Gorlois, estaba casado con Ingerna, dama de exquisita belleza ,   y deseada por el rey Uther Pendragón. Después de una dura batalla entre estos dos reyes, y cayendo muerto Gorlois, el rey Uther solicitó de Merlín que lediera  la  apariencia del rey Gorlois para así poder poseer a Ingerna. Merlín acepto dicha solicitud con la condición de que el fruto engendrado por la reina Ingerna le fuera entregado a el. 
Uther Pendragón en sus ansias de poseer a la reina acepto dicha condición y con la magia de Merlín adoptó la apariencia de Gorlois y corrió al encuentro de la reina poseyéndola carnalmente.

Al poco tiempo el rey Uther desposó a Ingerna, quedando legitimado el niño. Una vez nacido el niño le fue entregado a Merlín, tal y como prometió el rey Uther. Merlín a su vez se lo entregó a un noble, Sir Héctor, para que lo criara y educara, haciéndole prometer que jamás diría la procedencia del niño.

Viendo que no podía conseguir la espada y deseando que su hermano participara en el torneo, se acordó de la espada incrustada en la roca y fue a por ella, sacándola sin ningún esfuerzo. Cuando llegó al encuentro de su hermano y le entregó la espada, este le dijo que no era la suya. Arturo le contó lo sucedido y como consiguió la otra espada, entonces su hermano llamó a su padre y le narró todo lo acontecido, este se postro ante el, prometiendo lealtad al nuevo rey.

Cuando se supo la noticia, todos los caballeros acudieron al lugar donde se encontraba la espada para repetir la hazaña, introducida de nuevo en la roca, unos tras otros fueron probando fortuna, pero ninguno pudo sacar la espada, sin embargo Arturo, sin ningún esfuerzo, la volvió a sacar, aclamando todos los presentes al nuevo rey.

Algunos caballeros creían que era un insulto que el muchacho que no pertenecía a ninguna familia noble fuera rey, por lo que Merlín dio las explicaciones de su procedencia y quedando claro ante todos de que Arturo era el hijo del rey Pedragon y la reina Ingema.
Pero esta explicación no convenció a algunos caballeros que retaron a Arturo. Aquí empieza una apasionante aventura de un legendario rey que se reunía con unos valerosos caballeros en una mesa redonda, donde la magia y la fantasía reinaba a la par de ARTURO.